LA
NECESIDAD DE CENTROS DE MONITOREO
A pesar de que los reglamentos
municipales de Protección Civil establecen, en términos generales, que su
objetivo es salvaguardar la vida de las personas, sus bienes y el entorno a
través de la prevención, el auxilio y la recuperación en el marco de los
objetivos nacionales y estatales, las Unidades Municipales rara vez cuentan con
los elementos necesarios para conocer, comprender y entender el riesgo de
desastre, y consecuentemente, socializarlo con la población.
Concretamente, pocas veces se
destina presupuesto para la creación de Centros de Monitoreo, que cuenten con
personal capacitado en materia tecnológica, o de sistemas de información
geográfica, e inclusive en estadística y análisis de datos, que puedan hacer
proyecciones sobre agentes perturbadores, tanto antrópicos como naturales. Un
ejemplo de ello es que año tras año es común encontrar diversas falacias técnicas
en cuanto a la descripción de los fenómenos hidrometeorológicos por parte del
personal no asociado a las Geociencias, signo inequívoco del desconocimiento
que forma parte de la ocurrencia de un desastre.
Los estados costeros, como
Guerrero, Sinaloa, Yucatán o Quintana Roo, tienen la susceptibilidad de la
llegada de ciclones tropicales, aunque la probabilidad de un impacto directo
varía año con año, dependiendo de fenómenos atmosféricos y oceánicos de escala
planetaria, tal como el ENSO-NIÑO (por cierto, el más conocido). Sin embargo,
no debemos olvidar que existen otros fenómenos hidrometeorológicos capaces de
generar un impacto negativo, incluso superior a los ciclones, y que hasta la
fecha no han sido estrictamente estudiados, tales como las turbonadas (la más
reciente el 27 de enero de 2019, en Q. Roo) y las condiciones meteorológicas
que favorecen el desarrollo de incendios forestales (como los ocurridos en mayo
de 2019, también en Q. Roo), que, aunque no tienen un período de ocurrencia tan
claro, sus efectos e impactos están totalmente documentados tanto por
observadores meteorológicos como por los medios de comunicación.
Al igual que muchas áreas de
conocimiento, las Ciencias Atmosféricas se han vuelto interdisciplinarias, y absolutamente
necesarias para la Protección Civil y la Gestión del Riesgos, puesto que
contribuyen a las acciones de cada uno de los procesos de gestión, es decir
prevenir, preparar, mitigar los efectos, y adecuar las posibilidades de la
respuesta, la rehabilitación y la reconstrucción, en su caso.
Se hace, pues, indispensable,
dejar la visión cortoplacista en los municipios y comenzar a operar la Gestión
de Riesgos desde un perspectiva más científica y más humanista, interdisciplinaria
y profesional, por lo que es adecuado contar con un Centro de Monitoreo con
perspectiva científica, capaz de pronosticar adecuadamente eventos
hidrometeorológicos súbitos y de caracterizar el clima actual/futuro de un
municipio, estado o país, para participar, por ejemplo, junto a la Geología,
Geografía, Hidrología y el ordenamiento territorial, en el desarrollo de
políticas públicas que inhiban el incremento de la vulnerabilidad de una ciudad
ante el desproporcionado aumento de su población, y contribuyan a un desarrollo serio y sostenible.
Inclusive, socializar los
temas de la Protección Civil, la Gestión del Riesgo de Desastres y las Ciencias
Atmosféricas, nos permitirá allanar un poco más el camino hacia el objetivo
común de crear una comunidad preparada ante los efectos e impactos de un agente
perturbador.
Maestrante Ángel Aldair Felipe
Hernández &
Mtro. César Orlando Flores
Sánchez.
Completamente de acuerdo
ResponderEliminarMuy importante contar con centros de monitoreo!
ResponderEliminarSaludos estimado CORSARIO.
Es correcto. El dominio del campo meteorológico (junto con ciencias interdisciplinarias), el uso de instrumentación adecuada, y sobre todo, la constante observación y correcta interpretación de los diversos fenómenos en centros de monitoreo generan el mejor escenario para la prevención ante los riesgos hidrometeorológicos que ocupan lugar en nuestro estado. ¡Felicidades por tan acertada publicación!
ResponderEliminarSi bien es cierto que se necesitan más centros de monitoreo dentro de los cuales se abarque tanto la meteorología como la climatología, y para ello es fundamental que a parte del perfil del personal estos centros deben estar bien equipados e instrumentados para poder generar una buena base de datos y a partir de ella brindar información precisa y confiable. Por otra parte, la implicación de otros expertos además de las ciencias atmosféricas, tales como: hidrólogos, vulcanólogos, químicos, geocientíficos, geógrafos, sismólogos etc., es indispensable para ser respaldados científicamente ante la toma de decisiones y los fines que convengan, por mencionar uno la reducción del riesgo.
ResponderEliminarSaludos cordiales.